Ejecución:
Enfriamiento automático a partir de 28 °C: El efecto de refrigeración del chaleco está basado en los 20 elementos individuales de PCM (Phase Change Material) en el forro interior. Ya sea al ejecutar trabajos físicos duros o al encontrarse en entornos calientes: A partir de una temperatura cutánea de 28 °C, los elementos de PCM absorben el exceso de calor y se van licuando paulatinamente. Así se reduce la temperatura cutánea aproximadamente de 3 a 4 °C. Según el esfuerzo físico y la temperatura ambiente, el efecto refrigerante del chaleco confort Dräger se mantiene hasta cuatro horas.
Al almacenarlo se va regenerando en un máximo de cuatro horas: A una temperatura de almacenamiento inferior a 22 °C, los elementos vuelven a solidificarse por sí solos. Al cabo de un máximo de cuatro horas, los elementos vuelven a estar listos para el uso. Cuanto más baja sea la temperatura ambiente, más se acorta este tiempo. Se suprimen las laboriosas operaciones previas y posteriores, tales como se conocen de los chalecos de hielo.
Sensación de uso: La disposición de los elementos de PCM ofrece un alto nivel de libertad de movimiento, ya que se ajustan al cuerpo de forma flexible. El chaleco se puede llevar sencillamente bajo la ropa protectora, p. ej., la ropa de trabajo de bomberos o los trajes protectores frente a productos químicos estancos al gas. Los anchos cierres por adherencia aseguran el ajuste adaptado al cuerpo.
- Vida útil de los elementos de PCM: hasta tres años.
- colocación sencilla gracias al cierre por adherencia.
- Chaleco lavable tras retirar los elementos.